jueves, 9 de abril de 2009

Julio Cortazar - Un tal Lucas


Lucas, sus traumoterapias


A Lucas una vez lo operaron de apendicitis, y como el cirujano era un roñoso se le infectó la herida y la cosa iba muy mal porque aparte de la supuración en radiante tecnicolor Lucas se sentía más aplastado que pasa de higo. En ese momento entran Dora y Celestino y le dicen nos vamos ahora mismo a Londres, venite a pasar una semana, no puedo, gime Lucas, resulta que, bah, yo te cambio las compresas, dice Dora, en el camino compramos agua oxigenada y curitas, total que se toman el tren y el ferry y Lucas se siente morir porque aunque la herida no le duele en absoluto, dado que apenas tiene tres centímetros de ancho, lo mismo él se imagina lo que está pasando debajo del pantalón y el calzoncillo, cuando al fin llegan al hotel y se mira, resulta que no hay ni más ni menos supuración que en la clínica, y entonces Celestino dice ya ves, y en cambio aquí vas a tener la pintura de Turner, Laurence Olivier y los steak and kidney pies que son la alegría de mi vida.Al otro día después de haber caminado kilómetros Lucas está perfectamente curado, Dora le pone todavía dos o tres curitas por puro placer de tirarle de los pelos, y desde ese día Lucas considera que ha descubierto la traumatoterapia que como se ve consiste en hacer exactamente lo contrario de lo que mandan Esculapio, Hipócrates y el doctor Flerming.En numerosas ocasiones Lucas que tiene buen corazón ha puesto en práctica su método con sorprendentes resultados en la familia y amistades. Por ejemplo, cuando su tía Angustias contrajo un resfrío de tamaño natural y se pasaba días y noches estornudando desde una nariz cada vez más parecida a la de un ornitorrinco, Lucas se disfrazó de Frankenstein y la esperó detrás de una puerta con una sonrisa cadavérica. Después de proferir un horripilante alarido la tía Angustias cayó desmayada sobre los almohadones que Lucas había preparado precavidamente, y cuando los parientes la sacaron del soponcio la tía estaba demasiado ocupada en contar lo sucedido como para acordarse de estornudar, aparte de que durante varias horas ella y el resto de la familia sólo pensaron en correr detrás de Lucas armados de palos y cadenas de bicicleta. Cuando el doctor Feta hizo la paz y todos se juntaron a comentar los acontecimientos y beberse una cerveza, Lucas hizo notar distraídamente que la tía estaba perfectamente curada del resfrío, a lo cual, y con la falta de lógica habitual en esos casos la tía le contestó que ésa no era una razón para que su sobrino se comportara como un hijo de puta.Cosas así desaniman a Lucas, pero de cuando en cuando se aplica a sí mismo o ensaya en los demás su infalible sistema, y así cuando don Crespo anuncia que est&á con hígado, diagnóstico siempre acompañado de una mano sosteniéndose las entrañas y los ojos como la Santa Teresa del Bernini, Lucas se las arregla para que su madre se mande el guiso de repollo con salchichas y grasa de chancho que don Crespo ama casi más que las quinielas, y a la altura del tercer plato ya se ve que el enfermo vuelve a interesarse por la vida y sus alegres juegos, tras de lo cual Lucas lo invita a festejar con grapa catamarqueña que asienta la grasa. Cuando la familia se aviva de estas cosas hay conato de linchamiento, pero en el fondo empiezan a respetar la traumatoterapia, que ellos llaman toterapia o traumatora, les da igual.
Julio Cortazar - Un tal Lucas

16 comentarios:

  1. GRACIAS POR RECORDAR AL GRAN MAESTRO DE MAESTROS

    ResponderEliminar
  2. Bellamente escrito por un mago de la magia de las palabras
    volveré tu blog tiene "un no se qué"
    me gusta

    ResponderEliminar
  3. Apuesto a que nadie sabe el por qué del título.
    A ver...

    ResponderEliminar
  4. Espero que apruebes mi propuesta...

    ResponderEliminar
  5. -Podría haber sido el nombre del libro: “Un tal Julio”. Este se encuentra dentro del género “Narrativa”. En el Cortazár , nos ofrece consejos para lustrarse los zapatos, nadar en una pileta de gofio, dar conferencias. También habla sobre las costumbres de ciertas familias Argentinas. Del Amor. De los amigos., entre otras cosas. Dicen, los que saben que “Un tal Lucas”, es un manual contra la solemnidad.

    PD: No debería contestar este comentario ya que viene con la careta de un anónimo. Me agradan más los rostros que las caretas.
    Espero te haya servido. Ade

    ResponderEliminar
  6. Por qué no, Ade? responder no cuesta nada. Me ha servido tu punto de vista. Caretas? deberías de saber que no todos poseemos blog. Además, tienes la opción para anónimos, de no quererlo así, suprímela y ya no estaré por aquí.
    Quieres mi nombre y dígitos de pasaporte, o continuaría siendo anónimo?
    Saludos

    ResponderEliminar
  7. - Me agradan las personas, sus rostros sus nombres, lo que sienten, lo que piensan.
    No me interesan los pasaportes ni las formalidades. "Solemnidades" diria Cortazar, lo solemne me aburre y mucho. Segui en tu anonimato, después se todo es lo que te da placer. Ade

    ResponderEliminar
  8. hola pasaba por aquí y si no te importa me quedaré un poco. gracias.

    ResponderEliminar
  9. Hago una segunda vuelta al atardecer y leo los comentarios: Lo siento. No tengo nada que ver con el anterior comentario.perdona.

    ResponderEliminar
  10. Oh dios, Cortázar es un grande entre los grandes

    ResponderEliminar
  11. La narrativa no es un género, es una tipología textual. Lo que yo me pregunto, es porque no se cataloga a Un tal Lucas, en el género no-ficción, cuando es claro que habla de si mediante alter egos... en otra página alguien hablaba de novela y anti-novela, no entiendo a que se refiere, o entiendo, pero no me dice nada.
    saludos
    juan

    ResponderEliminar
  12. Lo estoy leyendo ahora, pero no me he resistido, acabo de empezarlo y sólo lo leo durante los viajes, así que va lento. Me ha gustado esa versión de curar el hipo a base de sustos, también sirve un relajante muscular, jejej, pero el resfriado... eso nunca lo hubiera imaginado, jejeje.
    Tienes un blog divertido e instructivo, me gusta, aquí te pones al día sobre Argentina.

    Desde los mares de _Extremadura, un abrazo
    Mimí

    ResponderEliminar